jueves, 13 de julio de 2017

¡Y no solo los diputados!

Mucho se habla sobre los "señores" diputados y su obsesión por disfrutar, además de sus habituales prerrogativas, del jugoso Bono 14 que se han recetado, el cual rechazo abiertamente como la mayoría de guatemaltecos, especialmente cuando no han pasado de la docena de decretos en medio año y cuando de éstos que menciono, el único logro verdadero es la Ley de Protección y Bienestar Animal, pero, ¿Qué hay de tanto otro "funcionario" que además del desmedido salario y demás beneficios también se ha perpetuado en cargos que les quedan cada vez más grandes pero que al finalizar su "gestión" también recibirán una indemnización que parecerá el premio gordo de alguna lotería? ¡Con qué facilidad pierde la vergüenza la gente!

Hoy, por lo congestionadas que resultaron varias calles y avenidas opté por hacer un alto y en su momento, recorrer alguna ruta desligada del desmedido tráfico que tiende a complicarse más cuando muchas de las vías se convierten en ríos o acueductos y no solamente porque la gente sucia lance todo tipo de ocurrencias a los tragantes, sino porque en más de tres décadas, la red de drenajes se ha quedado en lo mismo y las "autoridades" solamente cierran los ojos ante la problemática descrita y continúan en su acomodo aún cuando las observaciones, sugerencias, quejas, denuncias y reclamos se han hecho presentes.

Me detuve en los alrededores del Mercado La Reformita y me encontré con dos tragantes en menos de diez metros, algo que contrasta con los que puede encontrar quien recorre la 23 calle de la zona 12 en el costado occidental de ésta, donde hay que recorrer hasta 5 cuadras para encontrar uno. En fin, de los dos tragantes que recién mencioné, uno aparentaba estar "bien", pero el otro estaba tan saturado que cualquier vehículo que pasaba lanzaba enormes cantidades de agua hacia los costados, afectando una de las ventas lugareñas y, por supuesto, a los peatones. Pasó por mi mente la interrogante sobre la efectividad de los Alcaldes Auxiliares y, en particular, de nuestra "flamante alcaldesa" cuyo único logro aparente en los últimos meses ha sido el programa de "Aerobics en tu barrio" y mi pensamiento llegó más alto, hasta encontrarme con personajes de mayor rango que en la práctica, también brillan por su ausencia, al menos para dar fruto pues para recibir sus emolumentos seguramente nunca fallan.


Evitando esa "pequeña laguna" me desvié hacia la décima avenida, una versión en pequeño de lo que también se critica abiertamente pero a nivel macro, el penoso estado de las carreteras. Vi entonces que el históricamente maltrecho tramo luce cada vez peor, quizás ahora como resultado de la lluvia, pero sumado a ello, me dio pena ver que en casi veinte años, los vecinos del lugar todavía deben pasar patinando por la acera cercana al pequeño supermercado del lugar. ¡Situación vergonzosa a sabiendas de que en reiteradas ocasiones la esquina fue mencionada en reuniones que vecinos sostuvieron con personeros de la comuna! Aproveché en estirar las piernas y recorrer ese tramo que a pie "se sufre menos que en carro", aunque seguramente los zapatos no opinarían lo mismo dada la textura rugosa y pésimamente acabada del asfalto que, si no falla mi memoria, nos dejó la gente de Berger, mucha de la cual, no me sorprende que aún sigue encostrada en algún puesto municipal.


Y, sí, uno se cansa y se decepciona de ver que la gente hace lo contrario de lo que dice, especialmente estos que dicen que "cumplen", que "responden", que son "obras, no palabras", "acción", etc., etc. Basta ver esas pequeñas muestras de ineficiencia, descaro y acomodo, a las que se suman muchas otras diariamente. En numerosos sectores la gente acostumbra caminar por la calle y no por las aceras, pues, si las hay, se encuentran en pésimo estado, invadidas o interrumpidas. Hace ya muchos años, el personaje que tengo en mente dispuso iniciar su campaña "por la gente que camina" y desplegó cuadrillas que, aunque con más pinta que maña, construyeron aceras en donde los vecinos "se hicieron el quite" de colocarlas, pero fue un avance a medias, pasando por alto algunos tramos como el que muestro en la fotografía u otros aún más delicados donde las personas deben jugarse la vida cuando el tráfico pesado les pasa rozando en su trayecto hacia la Avenida Petapa, mismo que en reiteradas ocasiones he pretendido hacer ver a las "autoridades", pero sin ver resultado alguno. Eso sí, en la 24 calle, entre zonas 1 y 4, se molestaron en eliminar las aceras ya existentes y edificar nuevas (doble gasto, ¿Eh?) en la parte más alta de la referida arteria, claro que el proyecto avanza tan rápidamente que solamente llevan tres cuadras elaboradas en un solo costado...


Se suman los arbolitos que actualmente están sembrando en diferentes zonas de la ciudad y que seguramente ayudarán a embellecerla, así como a dotarla de una mayor y mejor estética y oxigenación, en lo que sea posible, pero que al igual que la mayoría de los sembrados anteriormente quedarán a su suerte, olvidados por la comuna hasta que su ramaje sea demasiado alto o extenso a falta de poda, como para justificar que salvajemente lleguen a cortar sus ramas o que por "remozar" una acera lastimen sus raíces y causen que con eso pierda el balance o quede expuesto a alguna infestación parasitaria que aproveche las fisuras y cortes. Por cierto que siempre se han dado a la tarea de "presumir" su continuidad y como todo lo realizado obedece a un plan a largo plazo, pero, ¡Vaya manera de evidenciarlo al cortar los cuadros de acera para colocar los arbolitos en lugar de haber previsto desde un principio el espacio para ello!

En fin. Termino la presente nota invitando a la reflexión y a dejar atrás la actitud pasiva que tanto ha caracterizado a la mayor parte de los ciudadanos. Hay que denunciar, hay que expresar nuestra inconformidad con los abusos que vemos en esta gente y que se traducen no solo en la falta de acciones y soluciones concretas, sino también en las ingeniosas maneras en que intentan maquillar o disfrazar la realidad.

Quede constancia de esto y, por favor, comenten, no permitamos que sigan con la cantaleta de que están "planificando la ciudad del futuro", ya es hora de que empiecen a ejecutar.

sábado, 16 de octubre de 2010

¿Son las aceras los nuevos
estacionamientos de motocicletas?

La Ley y Reglamento de Tránsito establecen claramente las funciones específicas que corresponden a cada uno de los elementos que encontramos en la vía pública, incluyendo los espacios destinados a los peatones, quienes usualmente parecen quedar últimos en el interés de muchos.

Así, vemos como los semáforos con buen funcionamiento quedan relegados ante la colocación de agentes de tránsito que dan vía por más tiempo del usual a los automóviles de x o y arteria, sin importar la cantidad de peatones que se encuentran esperando para atravesarla. De igual manera encontramos infinidad de vehículos que viran sin hacer las señales correspondientes aún cuando frente a ellos se encuentran las personas llamadas a hacer valer lo que los cuerpos legales citados establecen.

Pero hay algo aún más irritante para quienes recorren las calles y avenidas de la ciudad, fuera de la mala calidad de las aceras y la falta de sentido al construir estas: Los incontables obstáculos que pueden hallarse en un corto recorrido como el que ahora les presento luego de que en casi una decena de ocasiones lo hice del conocimiento tanto de agentes de la PMT como de personas pertenecientes a otras entidades municipales.

¿El lugar? Novena Avenida de la zona 1, en el trayecto de la Plaza Barrios a la Torre de Tribunales, Corte Suprema de Justicia, Banco de Guatemala y Superintendencia de Bancos, por citar algunos de los colindantes con dicha vía.

En ese recorrido, primeramente nos encontramos con numerosos postes que obligan a que si van dos personas juntas deban despazarse al estilo "Fila India" o a "Ceder el Paso" o, como hacen muchos, a "jugársela descendiendo de la misma como recientemente vi que lo hacían unas mujeres con niños coincidiendo con el viraje de una unidad del Transmetro. Estoy de acuerdo en que ahí encontramos responsabilidad de otras entidades y no solo de la Municipalidad.

Pasados unos metros encontramos otro asunto, cuya solución definitivamente corresponde a la autoridad, teniendo en cuenta que si no procede a educar y/o sancionar a los infractores, estará avalando que continúen haciendo mal uso de ese espacio. Al llegar a ese punto no tuve más remedio que trasladarme al lado oeste y utilizar la acera aledaña al edificio de Finanzas. Claro está que tengo uso de mis piernas y la vista no me falla, de lo contrario, esa simple maniobra hubiera podido ser fatal. ¿Desde cuando las aceras son estacionamientos para las motocicletas?

Tomemos en cuenta que sólo en la región metropolitana existen más de 105 mil personas con necesidades especiales, concentrándose la mayor parte de estas en la Ciudad Capital. Muchas de ellas padecen dicapacidades que les obligan a utilizar sillas de ruedas, muletas, andador o bastón y muchas otras no poseen el don de la vista, por lo que situaciones como la que aquí describo les resultan exponencialmente aún más perjudiciales que al resto de peatones.

Espero que finalmente, luego de semanas de menciones y denuncias infructuosas, esta nota llegue a quienes corresponda a fin de dar solución inmediata y definitiva al menos a uno de estos problemas, aunque lo ideal sería ver que ambos sean remediados.

No está de más hacer mención que esta nota la finalizo "amenizado" por una de las numerosas herrerías que en este sector obstaculizan la acera, además de ser parte de la indeseable contaminación acústica y visual que tanto perjudica al vecindario.

viernes, 12 de febrero de 2010

Ad effectum videndi

A pocos días de cumplirse un año desde el envío que este servidor hizo de una serie de correctivos a implementar en materia de tránsito en mis frecuentes trayectos a la Universidad de San Carlos y sectores aledaños (zonas 11 y 12), las autoridades municipales recipientarias del mismo se han quedado de brazos cruzados. De esa cuenta y luego de conocer que la comuna capitalina invertirá, en conjunto con el Gobierno Central la suma de Q230 Millones en la ejecución de 53 proyectos, me permito hacer pública parte del documento con la finalidad de que, tal como hago ver en el título de esta primera entrada, sea visto por todos los guatemaltecos e incluso por quienes viven más allá de nuestras fronteras.

Tiempo atrás, el señor Arzú obtuvo el reconocimiento al tercer mejor alcalde del mundo y soy de la idea que podría llegar al primer puesto, siempre y cuando se despoje del séquito de aduladores que seguramente le afirman que las cosas están bien en la ciudad y que el presupuesto está siendo invertido de la mejor manera posible. También reitero mi certeza en la capacidad del señor Alvaro Hugo Rodas, uno de los personajes municipales que más admiración y respeto me merecen pues por muchos años ha sido vivo ejemplo del eslogan "no pasa un minuto sin que vea a un trabajador municipal al servicio de usted" que meses atrás pudimos apreciar en diversos puntos de la ciudad.

Estoy plenamente convencido de que estas sugerencias, que ameritaron el agradecimiento vía telefónica del señor Ricardo De la Torre, vendrían bien a la ciudad y representarían un porcentaje mínimo de lo que este año piensan invertir.

Por supuesto que "todos somos la ciudad", pero debo reconocer que pocos nos tomamos la preocupación de actuar voluntariamente para buscar el mejoramiento de esta aún cuando eso nos represente ser objeto de críticas y presiones innecesarias, así que espero que con esta primera entrega de "A quien le quede el guante" podamos generar cambios positivos en nuestra querida ciudad de Guatemala y en toda la República.